La psicosis electromagnética

Vamos a moriiiir! 🙂 

 

El otro día mi amiga Gata, en un comentario, habló de la lipoatrofia circular.  Es una afección rara, que hace poco aparecieron casos en empleados ciertos edificios de Barcelona.  Es, en principio, inocua, pero que se manifestaba con aparición de ciertas deformaciones en piernas, etc… en forma de surcos o hendiduras.  Era como si les hubiesen hecho una liposucción localizada… Todavía nadie tiene repajotera idea de las causas reales del problema.  Se ha hablado de cargas estáticas, de ergonomía… de causas genéticas (estas últimas con cierto fundamento)… http://www.medigraphic.com/pdfs/derma/cd-2003/cd031f.pdf

…y cómo no, de radiación electromagnética de la instalación eléctrica.  Total, que me he dicho: voy a hacer un post, aunque sea un poco largo, que este tema siempre me ha gustado también.

 

¿Qué narices es eso de la radiación electromagnética?

La R.E (radiación electromagnética, vamos) es el nombre que recibe el bombardeo con unas partículas sin masa ni carga llamadas fotones.  Como no tiene masa, se mueve a la velocidad de la luz, y como no tiene carga, no modifica la configuración eléctrica del átomo directamente.  Este tipo de radiación se suele confundir con un montón de cosas: desde radioactividad (que sí, es radiación, pero no de fotones sino de partículas atómicas con carga y masa, como protones, mucho más jodidos), hasta con las cargas estáticas (que suelen ser iones como el electrón)…

 

La R.E. es lo que emiten antenas de móviles, microondas, circuitos electrónicos, cadenas de radio y televisión.  La luz es R.E  (si si, la luz, lo que rebota por todos lados y captan nuestros ojos…), así como los rayos X (que dan nombre a los aparatos de rayos X ;)), los rayos cósmicos y un montón de cosas.    ¡Todo esto es lo mismo!.  “¡Coño… pues los rayos X de buenos no tienen nada!”.  Pos la verdad es sí que son jodidos, sí… pero explico:

 

Los nombres son simple convención.  Sólo es una forma de delimitar bandas de frecuencias a las que vibra una R.E.  Y esa frecuencia, y sólo ella y no la cantidad de fuentes o partículas, es la que determina la energía de la R.E (Einstein lo puso en evidencia con su efecto fotoeléctrico, lo que valió su Nobel, por cierto).  La R.E. más energética, y por tanto, la de mayor frecuencia (y chunga) son los de la banda denominada "rayos Gamma". Son producidos en el espacio sideral de forma natural.  Su frecuencia es altísima: más de 30.000.000.000 de Ghz.  Su energía es de mas de 124.000.000 eV.  Ningun proceso industrial humano produce estas energías y frecuencias.  La Tierra está constantemente bombardeada con esa radiación, aunque la atmósfera para la mayor parte.

 

En comparación, las frecuencias que emiten los aparatos electrónicos y engendros humanos son ridículas: hasta 300 Ghz como máximo, que corresponde a la parte alta de las microondas y que da energías de 0.001 eV como máximo.  Lo habitual en las interferencias de los aparatos domésticos es de pocos Khz (1Khz = 0.000001 Ghz) o menos, lo que da energías de unas cutres millonésimas de milésima de eV y, en el caso de líneas de red, de unos cientos de Mhz, que viene a ser como la frecuencia de emisión de las cadenas de televisión, y se mueve en millonésimas de eV.

 

TODAS las frecuencias producidas por interferencias eléctricas o aparatos humanos están muy por debajo de otras frecuencias naturales omnipresentes y archiconocidas: los infrarrojos y la LUZ visible.  Lo dicho, la simple luz que captan los ojos, es R.E… y de energía muchísimo mayor que cualquier aparato humano, móviles y microondas incluidos. 

 

¿La peligrosidad de la R.E aumenta progresivamente, y por tanto, aunque sea poco, las bajas frecuencias pueden hacer algo?

Pos absolutamente no! La banda de rayos X son peligrosos, pero la de la luz visible por ejemplo nada de nada.  La peligrosidad de la R.E empieza bruscamente a partir del ultravioleta medio (por encima de la luz visible), en frecuencias a partir de 952.000 Ghz.  Y eso es por que sólo a partir de este punto la energía del fotón es suficiente para, en una colisión, desplazar un electrón fuera del átomo.  Esto cambia la carga del susodicho, y te puedes empezar a cargar moléculas.  Aquí empiezan lo que se llaman ondas electromagnéticas indirectamente ionizantes, y engloban los conocidos rayos ultravioletas (U.V) dañinos del sol, los rayos X, los alfa, beta y gamma antes dichos.  Y es ahí donde empieza el pollo, pero no antes.  Hasta esa frecuencia, el único efecto que puede jamás tener un fotón es mover la molécula, pero no romperá nada:  y eso significa simplemente que calentará el material.  Lo hemos experimentado todos ante una chimenea.  Pero es simplemente eso: el calor; no un “efecto misterioso” que te mata en silencio y se come la grasa.  Es decir: el calor que notamos de una barbacoa es exactamente lo mismo que la “temible” radiación de los malvados cables y aparatos eléctricos que invaden las oficinas, sólo que en la primera las cantidades y energías son mucho mayores, tanto que hacen que notemos el calor, mientras que en el otro no notamos nada por que está muy por debajo del umbral necesario para calentarnos (único efecto que nos va a hacer).

 

Vale…  Entonces… ¿por qué se ponen tomas de tierra en mesas, etc… en casos de lipoatrofia? 

Principalmente por prevención ante el “no se qué coño pasa”, junto con el efecto psicosis.  Las publicaciones sensacionalistas saben que los artículos de "exclusivas sobre peligros directos" y similares llaman la atención de la peña, ya que les afecta mucho más que no "el descubrimiento de tal partícula desconocida que hace no se qué, que me queda muy lejos… y que harían mejor en paliar el hambre en el mundo".  Por tanto, estos artículos son muy golosos de proliferar en revistas que se podrían calificar como "prensa rosa científica" sin control, o incluso prensa generalista pero que quiere vender morbo diferente de vez en cuando. 

 

El bombardelo contínuo acaba creando el ambiente propicio para que la peña esté "con la mosca en la nariz" sobre la ciencia, sus avances y sus aparatejos (que se lo digan al móvil).  Por ello, al más mínimo caso inexplicable, es terreno para habladurias, publicaciones, de falsas acusaciones y chismes que pone a la gente en guardia.  Por ello, muchas veces los "responsables" de todo esto se ven obligados a "hacer algo", aunque sea para que se vea que "se hace algo" y tranquilizar el ambiente.  Aunque sea a costa de gastar dinero del contribuyente en prevenciones inútiles, dándo palos de ciego, y que aparte lo único que hace es descentrar la investigación real.  

 

Igualmente, en el caso concreto éste, con la toma de tierra se trata de prevenir cargas estáticas (iones cargados, electrones en general).  ¡¡Nunca fotones!!.  La psicosis desatada por móviles y microondas hace que a la que se hable de radiación, se mezcle electromagnetismo, antenas, móviles, cargas, salchichas vienesas y lo que haga falta.  Si a eso le juntas ministros que no tienen ni idea y hablan “de oídas”, políticos que van de salvadores y quieren votos, y supuestos expertos en otros campos que han oído campanas…la cosa se lía que no tiene ni nombre.  Pero la verdad es que si la R.E tuviese efecto real en el ser humano (por debajo del umbral ionizante antes dicho), sería toda una revolución científica!

 

¡Por tanto, que nadie os venda la moto!  Que sea carga estática, mira, vale… Apostaría que es otra psicosis, pero reconozco que no lo tengo controlado.  Habría que mirárselo, pero compraremos barco de momento por aquello de que a veces ya es cansino ir siempre en contra corriente.  Pero la pobre R.E., hasta que se demuestre lo contrario, es inocente.   Al final, todo es consecuencia de esa especie de prensa rosa sensacionalista aplicada a la ciencia en vez de a la Obregón (podría quedarse allí que al menos es reconocible).

 

¿Podrían, incluso así, ser dañinos los fotones?

Pues por poder, podrían ser dañinos los fotones, las berzas y oir más de tres minutos un Do sostenido.  Por eso se investiga constantemente en situaciones realmente controladas qué efectos pueden tener estas cosas.  Y hasta dónde yo sé NUNCA se ha observado daño alguno.  El conocimiento que se tiene por parte de las personas que han dedicado su vida a esto es que es totalmente inocuo.  Pero si aún así mañana se observase algo nuevo, eso no quita la razón a unos y se la da a otros.  No es tan dificil decir "eso es malo" para vender revistas, y luego acertar de casualidad.  Es como si yo digo en plan iluminado que "se puede superar la velocidad de la luz", mañana se descubre que efectivamente sí, y quisiera yo algún tipo de mérito.  Es muy fácil decir lo que he dicho: lo dificil es dar base a mi afirmación.  Y ahí está el qué.  Se dice "han sido las R.E" sin ningún tipo de base… por que sí, por que no las entiendo (o mejor dicho, por que no las entiende la gente y cuela),  por que tienen mala pinta, y por que quiero vender artículos aprovechando la mala fama que le hemos ido dando entre todos… 

 

Na… por eso decía lo que decía en el antiguo post: "si te dejas de creer todo lo que te dicen, un mundo nuevo se abre"!

 

Curiosidades varias que nunca diran las publicaciones, esperando seguir chupando del bote de artículos sensacionalistas.

– La radiación que emite un móvil es órdenes de magnitud por debajo de lo que emite cualquier bombilla en forma de luz y calor.

– Cualquier cuerpo que esté una temperatura por encima del cero absoluto emite ondas electromagnéticas (es el calor que percibimos de él).  Esto significa que TODOS los cuerpos que tenemos a nuestro alrededor, incluyendo el cuerpo humano, un bolígrafo y el papel de water, emite ondas electromagnéticas.  ¡De hecho, depende de cómo lo midas y con alguna concesión, puedes conseguir que resulte que un cuerpo humano emita más radiación que un móvil…fíjate tú.

– Cualquier objeto que VEMOS está reflejando ondas electromagnéticas (y por eso lo vemos).

– Las bombillas, cuando se inventaron, provocaron una psicosis muy similar al de los móviles actuales.

– ¿Y el microondas?  Pos na… el truco del microondas es que emite la frecuencia de resonancia del hidrógeno, y esto hace, junto a una otras cosas, que su efecto CALORÍFICO se intensifique para los cuerpos con moléculas que lo contengan.  Por eso los platos, que no lo tienen, ni se enteran, y si se calientan es por que se ha calentado la sopa que contienen.  Nuestras corneas, desprovistas de protección, serían sensibles a esa frecuencia.  Por eso necesitamos protección.  Pero sólo por, entre otras cosas, ser ESA frecuencia concreta y darse en un aparato diseñado para potenciar su efecto por resonancia en una caja cerrada.  Muchas tecnologías de transmisión de datos, como Blue Tooth, funcionan en la gama denominada microondas.  Pero no generan el mismo efecto por que ni es la frecuencia “mágica” del hidrógeno ni la generaría un aparato diseñado para ese fín como es el horno microondas. 

– Un horno microondas necesitaría un agujero de 12 cm mínimo para irradiar al exterior.  Si no, la onda no traspasa.

– De hecho, en un horno tradicional los fotones son miles de veces más energéticos que los del microondas.

 

 

Pero bueno… ya he soltado bastante rollo.  Por si alguien duda… lo mismo pero mucho más detallado…

http://www.eeza.csic.es/eeza/documentos/RadiacionElectromagnetica_Esceptico24.pdf

 

…y un poco de sentido común…

http://yamato1.blogspot.com/2007/06/antologa-del-terror-electromagntico.html

 

Engaaa 🙂